viernes, 24 de mayo de 2013

Mi opinión – Amén, de Jesús de las Heras


Conozco al autor personalmente, así que me permitiré hacer un comentario en mayúsculas. CAMBIA LA PORTADA. Sinceramente creo que no le hace justicia a la novela, y como escribo lo que pienso y lo que siento, y en una ocasión ya lo hablé con él; me repito. A mí la portada me sugiere pajaritos y una vida risueña, pero en realidad habla de otra vida, que tiene de todo, y que tarde o temprano todos tendremos que vivirla. ¡O no! Supongo que eso va al gusto del consumidor.

El autor no para de sorprendernos con cada página que leemos, con cada situación que describe, y todo a través de su original protagonista con el que algunos, más que otros, podrá identificarse… más o menos. Desde su casa, hasta la de su suegra, desde España hasta la muralla China (y mucho más) y al final de vuelta al principio. ¿De qué va? ¡Aahhhh! No os lo quiero contar, porque si la vida no estuviera llena de sorpresas, para qué vivirla. Y si no entendéis esta pequeña moreleja, lo único que tenéis que hacer es leeros Amén.

Alexander Copperwhite

viernes, 17 de mayo de 2013

Mi opinión – La conjura de los sabios, de Luz Olier

La portada del libro me llamó mucho la atención. Sería un mentiroso si dijera que me ha atraído otra cosa, así que me limitaré a iniciar la presentación del libro mostrando mi lado más superficial, y acabaré profundizando en el significado y el mensaje que la autora desea transmitirnos.

Lejos de lo que yo acostumbro leer, o escribir, la autora captó de inmediato mi atención presentando los diversos y variopintos protagonistas de esta historia. He de admitir que hasta que no los conocí me sentí disperso, perdido en la búsqueda del significado o el propósito de la novela. Y entonces lo comprendí: no se trataba de mover personajes por escenas, sino de moverse a través de los personajes ente emociones. Una manera distinta de acción y aventura.

Advierto de que se trata de una lectura lenta aunque ágil; y me explico. Lenta porque tuve que profundizar en el mensaje (que básicamente se trata de la lucha entre el bien y el mal) y ágil porque la fusión con las situaciones, las localizaciones y las emociones te incitan a querer saber más. ¿Cómo es posible que unas pocas personas que provienen de diversos países, culturas tan diferentes, y de estratos sociales tan dispares, ser elegidas para cambiar el mundo? ¿Cuál es el denominador común? Pues la bondad, el sentido común y el amor por la justicia. Es una novela muy apropiada dados los días que corren. El lenguaje es muy culto; puede que demasiado para mi gusto ya que mi máxima pretensión es la de divertirme con la lectura, aunque siempre es bueno recordad términos que rara vez se utilizan. Eso sí, está magníficamente escrita. Para aquellos que buscan leer sobre lo que todos hemos de hacer, y rebuscar en su conciencia, con aventura, misterio y toques metafísicos, es una novela que no les defraudará, y para los que no… también.


 

 

domingo, 12 de mayo de 2013

De todo un poco - Érase una vez en el país de la escritura


A lo largo de estos años, he leído muchos artículos que hablan de los escritores y del camino que han de recorrer. He encontrado opiniones de todo tipo; alentadoras, desalentadoras, crudas, realistas, soñadoras, desproporcionadas, tediosas, graciosas, humanas. En el fondo creo que todas ellas (como todo lo que leo) han llegado a formar parte de mí, séase porque no las comparto o porque sí, pero siento que en todas ellas existe un nexo: Hablan del escritor, de la historia, de la manera de escribir e incluso de promocionarse… omitiendo, para mi punto de vista, lo más importante.

Para aquellos que nos gusta la literatura, escribir nos hace viajar, ser dueños y señores del universo. Poseedores de un poder infinito: el de crear y destruir, creando lo increíble aunque imaginable. Sinceramente yo pienso que lo más importante en la vida es ser feliz, y cuando nos enfrentamos al folio o a la pantalla en blanco debemos de estar tranquilos y en paz con nosotros mismos para poder volar. Si eres feliz, llegas al espacio atravesando las algodonadas nubes, y te deslizas como una pluma de oca hasta posarte bajo un árbol a los pies del Kilimanjaro. La esencia de la escritura reside en la libertad de nuestra mente.

Sé que esto no ayuda mucho en el momento de tomar decisiones sobre la promoción, la organización y la estrategia de ventas; ni siquiera nos ayudará en escoger género… enlace y desenlace de una historia. Pero qué somos los escritores, sino víctimas de nuestras propias ideas. Condenados al olvido… pero viviendo a través de nuestras historias. Ser escritor no es una decisión, es un camino que debemos recorrer. Y durante el trayecto, quizás, y sólo quizás, alguna de nuestras historias consigan atrapar una lágrima de un lector, un suspiro de un joven, un escalofrío de una lectora. Pero todo eso qué importa, si escribir nos hace felices.


miércoles, 8 de mayo de 2013

Si no lo cuento, reviento – El escritor, lector, bloguero, editor, y amigo... Ramón Cerdá


Esta mañana me fui al banco (sin comentarios, y eso que era para ingresar y no para pedir) y después me acerqué a correos porque los buzones de mi piso los han roto (alguien que se aburría mucho… supongo). En fin, lo que parecía que iba a ser un día soleado, pero con algún que otro adjetivo calificativo dirigido a todo lo que desagrada, se transformó en un día soleado y lleno de positividad. El cartero me entregó un paquete con dos novelas de Ramón. Bueno, en realidad era una, aunque en dos formatos distintos. Lo que más me alegró no ha sido el hecho de recibir este regalo (que ayuda muuuucho) sino el hecho de que Ramón Cerdá esté interesado por mi opinión sobre su novela “El encantador de abejas”, y también referente a qué formato me parece mejor y más atractivo.

Pero de su trabajo hablaré en “Mi opinión” ya que ahora me voy a centrar un poquito en él. Nos conocimos cuando presentó un libro de un colega mío, y compartimos mesa en la distancia. Distancia que cuando el acto terminó, nos levantamos de nuestras respectivas esquinas para saludarnos como si nos conociéramos desde siempre. Eso sí, con la educación, la seriedad y el respeto que Ramón inspira a quienes le rodean. Siempre con una sonrisa en la boca, está dispuesto a escucharte sin hablar todo el rato de sus novelas y de su trabajo. Por supuesto que la literatura es uno de los temas principales, pero no el único. Desde entonces hemos coincidido en otras ocasiones y he de admitir que él siempre está dispuesto a colaborar en mis disparates (no es que sean muchos, y aunque sólo fuese uno bastaría). Por ejemplo, en una presentación que hice en Valencia, y que llegué cinco minutos tarde porque me perdí, nada más entrar nos vimos, nos estrechamos la mano, y le dije que me iba a presentar él. Ya ves. Iba superpreparado. Y ante el único reproche de “eso se avisa antes”, sonrió y me presentó. Parece fácil, pero en realidad es muy inusual y un marrón.

Pienso que es una de esas personas que puede parecer demasiado seria, pero que enseguida extienden la mano para apoyar a otro sin pedir nada a cambio. Como muchos otros escritores, se ha enfrentado a la quimera editorial y ha labrado su propio camino. No hablaré de los miles de seguidores o las centenas de miles de libros que ha vendido, pero sí mencionaré el hecho de que ha creado una “pequeña” editorial-imprenta, donde por muy, muy, muy poco, cualquier autor puede ver su libro en papel. Y lo digo en serio, a veces creo que incluso pierde dinero. En una ocasión me dijo que lo hacía porque le gustaba, y porque estaba harto de que no existiera una alternativa sencilla y honesta para los escritores. Sencilla y honesta. No es que otras no lo sean, pero no las conozco. Le he catalogado en las personas que “importan”, porque así es como lo siento. Y puesto que hoy me has alegrado el día, te  mando un saludo y un abrazo querido amigo.


sábado, 4 de mayo de 2013

Mi opinión – Sucede a diario, de Frank Spoiler


¿Qué se puede comentar cuando lees muchos relatos breves, en un breve instante? Pues algo muy sencillo: Lo breve y bueno, es dos veces bueno. Conocía la faceta poética del autor, pero no que escribía relato corto; y mucho menos de terror. No sé por qué decidí leer este libro de relatos (como muchos otros libros) lo que sí sé es que lo he disfrutado mucho. Para empezar, con el título Frank nos lo cuenta todo: Sucede a diario. La mayoría de las historias las podríamos ver en el telediario, escucharlas como una historia pasada que aconteció en nuestra localidad, o incluso imaginarnos que sucederá a uno de nuestros vecinos. Es muy extraño.

Una de las historias me llamó mucho la atención. Trataba de un hombre que había estrangulado a su mujer. Los motivos… descubrirlos por vosotros mismos. Yo sólo recordé a todas aquellas personas que cuando discuten, o se sienten frustradas, dicen como si nada “te voy a matar”. Y lo cierto es que tan fácil es decirlo, como hacerlo. Fácil como acto físico, pero difícil convencerse mentalmente. Por mi parte, prefiero matar a diestro y siniestro en las historias inventadas; al igual que Frank Spoiler que no omite detalles y sensaciones en lo “cotidiano” de sus crímenes. Hay para todos los paladares. En sus escritos, también creo destacar denuncia social, preocupación por la ecología, e interés por lo humano. Me parece una forma muy acertada la de concienciar a los lectores describiendo cruelmente crueldades que sin su crudeza ni nos importarían. Y para los fans de la ciencia ficción le diré… que se lee a la velocidad de la luz.