domingo, 6 de octubre de 2013

De todo un poco – Unos truquitos a la hora de escribir


Creo que una de las preguntas más básicas que uno se hace cuando en algún momento de su vida decide escribir, es ¿cómo lo hago para que llegue a la gente? No se trata de una pregunta trampa, o de un condicionante que limite nuestra manera de expresarnos o de contar una historia. Sencillamente es una pregunta que se limita a enriquecer lo que hacemos, con el fin de llegar a un número mayor de lectores.

En varias ocasiones me han preguntado sobre mis trucos, y si funcionan; y yo siempre me escondo tras respuestas “tipo” para no entrar en polémica. Pero creo que al hacerlo por escrito y en mi Blog, las respuestas serán más sencillas y menos viciadas. Pero eso sí… no sé si funcionan… jajaja…

1º Siempre hay que escribir con el corazón, pero sin que la mente se quede al margen. No hay nada más aburrido que leer una historia donde se habla mucho de amor, pasión, odio, venganza, etc… pero sin saber muy bien qué nos está contando el escritor. Vamos, que la historia tenga pies y cabeza.

2º El vocabulario sencillo, aunque no repetitivo. No se debe intentar utilizar demasiadas palabras de poco uso, no porque nos dirijamos a un público “pobre”, sino porque la gente lee novelas para entretenerse, y no para llevar de paseo un diccionario.

3º Capítulos no demasiado largos, donde los diálogos formen parte del decorado, para que no se haga monótona la lectura a la vista, o a la mente.

4º Siempre deja un cabo suelto al final de cada capítulo. Aumenta el interés por seguir.

5º No hay que describir con milimétrica exactitud los escenarios elegidos. Con unas pinceladas por parte del autor, para que el lector se monte su propio escenario, es más que suficiente.


6º No se ha de tener miedo a adentrarse en lo más místico de los escenarios que nos rodean, o lo más oscuro de nuestros propios pensamientos. Cuando uno escribe ha de ser libre en su mente… y explayarse.

¡¡¡Ahh!!! Y nunca dejar de escribir… nunca rendirse…

3 comentarios:

  1. Escribir con el corazón sin dejar la mente al margen, de eso se trata. Gracias por compartir estos truquillos, Alexander. Un abrazo.

    ResponderEliminar